
A los que tenemos barco lo que más nos gusta es navegar y compartir esta afición y este maravilloso contacto con la naturaleza con personas afines y muy cercanas. Llevarte a la familia o amigos a navegar es uno de los momentos soñados por un marinero!
Sin embargo, a veces no hay manera de conseguir que nos acompañen a dar una pequeña vuelta. Las personas que queremos, en ocasiones, tienen muchos pre-juicios que no quieren verbalizar y un poco de ansiedad por la novedad. O una imagen preconcebida no muy agradable que debemos desterrar. También puede pasar que en nuestro ímpetu porque compartan esta afición con nosotros se lo presentemos inadecuadamente, a boca jarro y en su totalidad. ¡Quizás con demasiada insistencia! Lo cual puede producir rechazo. Hay que ser prudentes e ir poco a poco. A los que no les interesa este tema en un principio, no debemos agobiarles con sus maravillas que ellos no ven. O nos arriesgamos a que nuestras salidas en barco sean muy solitarias y a veces, conflictivas.
Muchas de estas personas nunca han ido en barco y suelen tener dos pensamientos muy extremos:
- Ir en barco es algo normal como ir en coche, no necesito ninguna recomendación extra. ¡Vaya tontería! Lo que pasa es que no me apetece, me parece aburrido!
- Ir en barco es un estrés, seguro que me mareo, además no se como tengo que ir vestido/a ni lo que debo de hacer a bordo. ¿Debo comer algo antes? Si lo pregunto pareceré tonta/o o con muy poco “mundillo”.

No siempre es así, claro, pero sería positivo para ellos y para nosotros conseguir que nos escuchen una serie de consejos básicos para que su viaje (y el nuestro) sea mucho más agradable de lo que pueda parecer a priori.
Te ofrecemos a continuación, una serie de argumentos para poder desmontar sus objeciones o ideas preconcebidas y ayudarles a disfrutar de la navegación:
1.- YO NO ME MAREO NUNCA. ¡Vale seguro que no pero es la primera vez que subes a un barco y esto es otra cosa! Quizás sea conveniente que lleves a bordo y le des a tu invitado una biodramina o similar y tomes precauciones. La misma recomendación para entrar en cabina cuando ya se está navegando. Todavía no está acostumbrado, mejor es que disfrute del paisaje en cubierta y que no se mueva mucho. En principio, la bañera será el lugar ideal, pues estará más cómodo y protegido. ¡No menospreciemos el mareo en barco porque nosotros ya lo hayamos superado! A veces es como una borrachera enorme. Los síntomas incluyen palidez, náusea, vómito, fatiga, cambios de visión, y sudoración. Cuando el novato esté en cubierta le indicaremos que lo ideal es que mire a lo lejos, a poder ser a otros barcos en movimiento. Comer algo de pan o unas aceitunas, le vendrá bien. Dicen los navegantes que una manzana verde a bocados sienta estupendamente.
Si a pesar de haberse tomado la biodramina y tener todas estas precauciones, nuestro amigo/a empieza a marearse, volvamos rápidamente a puerto. Si necesita vomitar, por la borda, ni se te ocurra que baje al aseo, o a la cabina a tumbarse, sería peor. Esperemos que se le pase rápido, que la sensación de mareo sea suave y que no le traumatice o le costará mucho volver! Lo mejor para minimizar la posibilidad del mareo …. No hablar de ello y dar por hecho que nadie se va a marear! ¡suerte!

2.- SIEMPRE LLEVO ZAPATOS DE SUELA OSCURA O NEGRA. A un barco no se debe ir con calzado de suela de goma oscura ya que algunos dejan manchas en la superficie. Ante la duda, mejor de goma blanca. Cualquier zapato playero con suela de goma, a poder ser cerrado que recoja el pie para evitar golpes y resbalones. Los invitados no entenderán esta sugerencia, habrá que explicarles que cuesta mucho quitar las manchas y que tú eres el encargado del tema, o sea, que no se admiten suelas oscuras. Con cariño, claro!!
3.- IRÉ VESTIDA NORMAL PORQUE ASI CUANDO REGRESEMOS YA ESTOY LISTA PARA MI CITA. A un barco debemos ir con ropa muy cómoda y apta para ser mojada por el mar en cualquier momento. Nunca llevaremos tacones ni faldas ajustadas ni camisas de vestir, solo ropa playera. Un traje de baño y una camiseta, bermudas y calzado adecuado es lo ideal. O un vestido playero encima del traje de baño y calzado de goma, para las chicas. Llevar una toalla de baño sería muy adecuado. Si luego tenemos que ir a algún sitio, llevaremos ropa apropiada para esa ocasión en una bolsa.
4.- YO YA ESTOY MUY MORENO/A Y NO NECESITO PROTECCIÓN SOLAR. Siempre debemos llevar una crema con protección alta ya que en el mar estamos completamente expuestos y es el lugar donde más nos afectan los rayos UVA por la acción espejo del agua que refleja los rayos solares hasta un 25% más. Siempre nos pondremos protección solar aunque el día esté nublado y aplicarla con frecuencia. Además unas gafas de sol y un gorra serán apropiadas.

5.- LO MEJOR SERÁ QUE LLEVE UNA MALETA TIPO TROLL COMO LA QUE LLEVO EN EL AVIÓN. Es preferible que al salir a navegar, si necesitamos llevar maleta porque vamos a dormir o a pasar una larga jornada, llevemos bolsa flexible para que se pueda guardar y adaptar al hueco que le corresponda., para que se estibe correctamente. El Patrón o Capitán te indicará dónde se ponen las cosas. Si la bolsa es impermeable, mucho mejor. Ya sé que tu maleta es muy pequeña y te parecerá perfecta para dejarla en una esquina pero en el barco no hay esquinas, ni maleteros, los huecos para dejar cosas son irregulares. Por eso es necesario que lo que llevemos se pueda adaptar al espacio disponible.

Es deseable que a bordo no fumes ya que aunque estas al aire libre, el humo le llega a los demás y alguno se puede marear. Incluso te puede sentar mal a tí aunque te extrañe. Y en el caso de que lo hagas, puedes fumar a sotavento que es por donde se va el viento y no tirar la colilla al mar, bajo ningún concepto.
El mar no es un basurero y debemos cuidarlo, bastante contaminado lo tenemos ya. Además, fumar conlleva riesgos para la seguridad del barco ya que podemos tener en nuestro entorno productos inflamables, como la gasolina del motor, o de la neumática auxiliar, etc.
7.- NOS TOMAREMOS UNAS COPAS, NO? Estar en el mar es una nueva sensación, para ti y para tu cuerpo. Posiblemente tendrás la tensión algo más baja y puede que el alcohol te haga más efecto. Unas cervecitas, en el caso de que te encuentres estupendamente, pueden ser bien aceptadas. Una copa de alta graduación solo te la recomiendo si estas dentro del barco pero atracado en puerto. La sensación de regresar de una excursión navegando con una copa de más creo que es inolvidable.

8.- PREFIERO SUBIR AL BARCO SIN COMER NADA. No es necesario subir a bordo con el estómago vacío, es más, es recomendable comer algo antes aunque nunca atiborrarse. Y ya en el barco, algo salado como unas aceitunas generalmente sientan muy bien.
9.- ME GUSTA BEBER EN VASO DE CRISTAL. Aunque un vaso o una copa en tierra casi siempre son de cristal, a bordo no utilizaremos este material, es peligroso e innecesario. Nos puede complicar mucho la navegación el que un simple vaso se caiga y se rompa en mil pedazos. Adiós a andar descalzos por la cubierta con el riesgo de tropezar con los pequeños cristales que siempre quedan. Si hay niños, el cristal está prohibido. Existen vasos de material adecuado, irrompible, y además, bonitos, incluso copas.
10.- SOY NOVATO EN ESTO. Si es la primera vez que nuestro familiar o amigo sube a bordo, le daremos una pequeña vuelta, no intentaremos llevarle desde Denia a Cerdeña, por ejemplo, ni a cruzar a Baleares. Es mejor que tengamos la seguridad de que el viaje sea un disfrute y de que se vaya adaptando poco a poco a esta nueva sensación. Si podemos elegir las condiciones de navegación, mejor. Si el mar está en calma y el viento es suave, será el momento perfecto.
Además de estos consejos básicos para poder subir a bordo y navegar con tranquilidad, será conveniente que nos pongamos en su lugar, veamos cuales son sus temores y los vayamos solucionando poco a poco, y de uno en uno.
Podemos lanzar mensajes de los beneficios del aire y el mar en la navegación, como son el relax mental asegurado. Al estar tan cerca del mar y tanto rato de continuo nos beneficiamos de nutrirnos de este aire marino cargado de iones negativos. Los iones son partículas que forman el átomo y cuya carga puede ser negativa o positiva. Los iones negativos se generan en entornos de naturaleza como el mar, los río y las cascadas. Tienen un efecto muy saludable en las personas ya que al relajar favorecen la producción de serotonina tan importante para la función cerebral. Los iones negativos que recibimos al estar sobre el mar son cien veces superiores a los recibidos en ambientes urbanos.
Pero como apuntábamos, sin son invitados, son invitados. De momento no les pongas a realizar ninguna faena náutica porque puede ser el punto que les hará desistir de volver definitivamente. Es su primer viaje, pues agasajemos al invitado y hagámosle el viaje lo más placentero posible, pensando sobre todo en él. A cuerpo de rey, vamos.
¡¡Quédate aquí en la bañera o en cubierta, sin moverte, dime lo que quieres o necesitas en cada momento y contempla la belleza del mar y, sobre todo, relájate!!

Mañana será otro día. Y a disfrutar de la navegación en compañía.